Cuenta la leyenda que un rey de Java desterró a su hijo por su desobediencia. Le vio alejarse hasta que desapareció en el horizonte y trazó una línea en el suelo. Los mares se acercaron hasta aquel lugar y nació la que ahora conocemos como isla de Bali.
La Isla pertenece a la República de Indonesia, y se sitúa unos grados al sur del Ecuador. Tiene 140 kilómetros de longitud y noventa de anchura, donde habitan tres millones de personas.