`Las amargas lágrimas de Petra von Kant´ muestra las contradicciones del individuo entre el discurso ideológico y su puesta en práctica; contradicciones derivadas de los cambios en la visión del mundo.
Principios de los años 70. Petra von Kant, diseñadora de moda, recibe la propuesta de hacer una gran colección. La visita de su amiga Sidonie. Ambas se definen a través de sus relaciones con los hombres. Sidonie alaba las virtudes de la humildad y la buena educación en el matrimonio; Petra rebate su discurso alegando que la humildad conduce al sometimiento; defiende la libertad en el amor.
Sidonie le presenta a Karin, Petra queda fascinada por la joven y la invita a cenar. En la misma cita le declara su amor, le propone vivir juntas y le promete que la convertirá en su modelo. Después de unos meses de convivencia, Karin sustituye la formación y la disciplina por la diversión; recibe una llamada de su marido y se marcha. Petra, sin Karin, cae en depresión. El día de su cumpleaños, ante la ausencia de Karin, rompe con su mundo de relaciones. A solas con su madre, reconoce que no ha amado a Karin, que sólo había querido poseerla.
`Las amargas lágrimas de Petra von Kant´ muestra las contradicciones del individuo entre el discurso ideológico y su puesta en práctica; contradicciones derivadas de los cambios en la visión del mundo.
Fassbinder situó la historia en los inicios de los años 70, con el auge del movimiento feminista cuestionando la relación entre los sexos. A la lucha de la mujer por su liberación se le oponía el modelo de educación patriarcal que dominaba el mundo. Petra von Kant reproduce en su habitus los mismos patrones masculinos de relación (dominio, sumisión, control) que trata de combatir. El hombre, ausente físicamente en la obra, está en la base de los discursos de los personajes femeninos que conforman el reparto. Cada personaje expone su visión sobre el precio de amar y ser amado. El conflicto surge por el afán de posesión. Las relaciones que establecen los personajes con el amor constituyen un reflejo de cómo interactúan los grupos sociales en la economía de mercado. El autor vinculó en la obra el lesbianismo y la condición femenina, y -visionario- parecía señalarnos que las transformaciones de ambos universos – la lucha feminista y la del colectivo homosexual han corrido paralelas – no consistían en reproducir modelos conocidos sino en dar un vuelco a los mismos fundamentos que producen y reproducen el capital de símbolos en nuestro entorno.